El cuarto disco de Tamikrest, “Kidal” (Glitterbeat, 2017), es un homenaje del grupo tuareg a la pequeña población del norte de Mali ─rodeada de una extensión interminable de tierra estéril, roca y arena─ que ha jugado un papel crucial en la reciente historia de los nómadas del Sahara. Además, fue el lugar donde se encontraron los músicos que dan forma a la banda, y que desde 2010 con “Adahg”, están editando discos en los que la música es su arma para defender la dignidad, los derechos y libertad de sus comunidades.
“La música es un arma cargada de futuro” proclamó el nigeriano Fela Kuti, creador junto a Tony Allen del afrobeat en la década de los años 70. Y “Kidal habla sobre la dignidad” dice Ag Mossa, «consideramos el desierto como un espacio de libertad para vivir. Pero muchas personas lo consideran como un mercado para vender a las empresas multinacionales, y para mí es una gran amenaza para la supervivencia de nuestros pueblos nómadas».
29 / 04 Huesca C. C. Manuel Benito Moliner
30 / 04 Valencia Ram Club de Rambleta
01 / 05 Barcelona Bikini
Herederos de Ali Farka Touré
El álbum de Tamikrest lo han grabado en Bamako, capital de Mali, en el verano de 2016, la misma ciudad donde en 1999 el ingeniero Yves Wernert, el productor Phillippe Berthier con el soporte del Ali Farka Touré (1939-2006) crearon los Studio Bogolan (antes ya Berthier y Ali Farka ya habían compartido Mali K7 record, y situado en las inmediaciones). Por las salas del estudio de grabación han pasado los mejores artistas de África Occidental, desde la gran diva Oumou Sangaré, a la venerable griot Bako Dagnon y el gran Bassekou Kouyaté o el maestro de la kora Toumani Diabaté. La antología “Mali All Stars: Bogolan Music” (2013), un disco doble con 28 temas, recorre algunos de los artistas que han grabado en unos estudios ya míticos. Ali Farka Touré, fue músico, agricultor y alcalde de Niafunké ─pequeña aldeo junto al río Níger, en la franja central del país, y a la que dedicó uno de sus grandes trababjos─, creó un estilo propio basado en una tradición ancentral y en conexión con el blues rural americano que dio lugar a la etiqueta comercial desert blues.
Entre las dunas
En una entrevista Toumani Diabaté recordaba su trabajo con Ali Farka Touré, “In the heart of the moon” (2005), un álbum muy importante porque por primera vez en ha historia del país africano, un músico del norte y del sur se unían para grabar, compartir músicas y crear un repertorio. El disco conjunto, fue premiado con un Grammy y obtuvo el máximo reconocimiento del prestigioso panel de la WMCE. Diabaté explicaba a Los Sonidos del Planeta Azul que Ali Farka Touré no solo era el gran maestro de lo que se denominó desert blues, fue el pionero de una forma de hacer música que daría lugar a Tinariwen, Tartit, Toumast, Terakaft o Tamikrest.
‘Kidal’ de Tamikrest se publicó el pasado 17 de marzo en Glitterhouse Records glitterbeat.com
