- Del 28 de noviembre de 2012 al 24 de febrero de 2013 la BNE acoge “El ruido alegre” una exposición a partir de los fondos conservados en el Departamento de Música y Audiovisuales de la institución donde se acercará al gran público el jazz.
La Biblioteca Nacional de España ofrece hasta finales del mes de febrero una exposición donde se recogen testimonios documentales de las diferentes estapas en la evolución del jazz en España y la recepción del jazz estadounidense. Y si la historia es el hilo conductor de las obras seleccionadas el impacto visual y la calidad gráfica ha sido el criterio en la selección de las piezas mostradas que van desde carteles a partituras, anuncios, libros, periódicos, casetes y vídeos.
Esta exposición pretende mostrar la relación de España con el jazz a lo largo de un siglo, a través de los documentos conservados en la Biblioteca Nacional de España. Esa relación ha atravesado diferentes periodos: el descubrimiento, la fascinación o rechazo, la comprensión, la imitación al pie de la letra y la asimilación bajo formas propias. Primero fue la música negra concebida todavía para el atril. La revolución del jazz fue preparándose con los primeros ritmos sincopados de origen afroamericano: el ragtime, el cakewalk, el foxtrot. Estas músicas y danzas para piano y orquestina de salón atravesaron el océano y cautivaron a Europa. París fue de algún modo la primera capital en ceder a su encanto, y desde París llegó el jazz a España”. Jorge García
Las vanguardias intelectuales de la época acogieron el jazz como una manifestación más de la vida urbana moderna, así le dedicaron ensayos y poemas, se publicaron crónicas de sociedad que estuvieron ilustradas por fotografías. “Ilustradores, publicistas y cartelistas también verán enseguida un provechoso filón en la poderosa estética del jazz, y lo aplicarán a la venta de productos de lo más diverso. Ese interés alcanza igualmente al ámbito de la literatura, donde foxtrot, shimmy, charlestón y jazz se convierten en señales de un estilo de vida desprejuiciado, característico de la nueva juventud” indica el comisario de la exposición Jorge García en la presentación de la exposición.
“La música grabada, en todas sus manifestaciones (desde el rollo de pianola hasta el disco compacto) ha permitido conservar testimonios del jazz hecho en España a lo largo ya de un siglo, y la muestra recoge también algunas de las piezas más significativas de esta faceta de nuestro jazz”.
El ruido alegre. Biblioteca Nacional de España (Pº de Recoletos 20-22. 28071 Madrid). Del 28 de noviembre de 2012 al 24 de febrero de 2013. De martes a sábado de 10 a 21 h. Domingos y festivos de 10 a 14 h. www.bne.es
