La kora es el gran arpa africana que ha acompañado a los griot en la narración de la historia de la etnia mandinga desde hace varios de años (ngoni, el antecesor del banjo, lo hizo desde mucho antes). Como instrumento solista el primer disco que se publicó se remonta a la década de los años 70, los padres de Toumani Diabaté y Ballaké Sissoko hicieron la primera antología de la música mandinga. Desde entonces a la kora la hemos escuchado integrada en grupos africanos, junto a músicos de otras áreas del planeta y en diversas propuestas. Ha dúo de koras (como los que hicieron Diabaté y Sissoko rememorando el trabajo de sus progenitores), pero también con violonchelo (Vicent Segal y Ballaké Sissoko), guitarra (Diabel Sissokho y Ramon Goose),… y el extraordinario “Djaliya” con tompreta del senegalés Ablaye Cissoko y el alemán establecido en EE.UU Volker Goetze. Este trabajo está dedicado a los griot (o jalis como denominan el pueblo Mandinga), los maestros de la palabra y su labor de transmisión de la historia, la tradición y memoria (tradición oral). El resultado es asombroso, desarrollos musicales que podemos circunscribirlos al ámbito del jazz vanguardista y donde el voz sedosa del músico africano acaricia las melodías, las notas de sus instrumentos jugando de manera fluida. El dúo se conoció en 2001 cuando tocaron junto a la African-European Jazz Orchestra en Senegal, desde entonces no han dejado de colaborar. Este álbum que presentan es la tercera entrega ─antes publicaron “Sira” (2009) y “Amanké Dionti” (2012)─, de un proyecto artístico transcultural, original y vanguardista.
ABLAYE CISSOKO & VOLKER GOETZE
Djaliya
(Kora And Ko / Karonte, 2014)
www.ablaye-cissoko.com