Duquende regresa al estudio para grabar un disco extraordinario, un álbum de flamenco de muchos quilates tras las experiencia con el proyecto «Qawwali Flamenco” (Accords Croisés / Harmonia Mundi, 2006), junto al cantaor Miguel Poveda y el pakistaní Faiz Ali Faiz, y la edición del álbum en directo en el Cirque d´Hiver de París editado hace cinco años y que fue grabado en el mismo lugar donde estuviese Camarón en 1987. El cantaor de la Isla de San Fernando le invitó con tan sólo 8 años a subir al escenario, de él es un gran admirador y  recientemente ha presentado el espectáculo “Camarón, La Leyenda del Tiempo” junto a Chicuelo celebrando el aniversario del magistral disco. El álbum ha sido producido por Pepe de Lucía, quien dice del cantaor de Sabadell que puede ser un gran desconocido aunque muy admirado por sus amigos y compañeros. Juan Rafael Cortés Santiago (1965) es uno de los secretos mejor guardados del cante flameco pese a que ya ha editado ocho discos –el primero fue “Soy el duende” (1988)- y es el cantaor elegido por el maestro Paco de Lucía para sus giras internacionales. Para el disco ha contado con los mejores guitarristas, desde Paco de Lucía y Tomatito, a Cañizares, Moraíto hijo, Niño Josele, Niño Pura, Enrique Abellán y Raimundo Amador. Ha grabado con impecable solvencia tangos flamencos, bulerías, tangos rumbas, fandangos de Huelva, rumbas, alegrías y cierre por tonás. El disco se abre con unas emocionantes malagueñas dedicadas el maestro Morente donde Cañizares le aporta la elegancia y precisión de su sabio toque. En este disco la voz camaronera de Duquende, madura y sobrecogedora, alcanza niveles artísticos estratosféricos.