“Este disco está creado y producido por Enrique Morente y es el reflejo de lo que fue mi alegría”, así lo indica Estrella Morente en la carpeta del álbum que ha tenido que concluir con Isidro Muñoz debido a la inesperada desaparición del genial maestro en diciembre de 2010. La carrera de la cantaora granadina había estado guiada por el maestro Morente cuidando todos y cada uno de los detalles desde que debutó en 1997 decidida a cursar la carrera más complicada y larga, el aprendizaje del cante y arte flamenco; el maestro había afirmado en varias ocasiones que las expectativas que había puesto se habían superado ampliamente. Estrella considera este trabajo con el mejor de su carrera. Han participado un pléyade de grandes artistas flamencos, grandes guitarristas como Paco de Lucía, Tomatito y Vicente Amigo, acompañándola por seguirillas, bulerías y tangillos, en algunos de los momentos magistrales de esta obra. En “La habanera imposible”, con letra y música de Carlos Cano y adapta por el “ronco del Albaicín”, la cantaora alcanza las cimas del arte más grande, imposible escucharla sin que la memoria nos recuerde la imagen desgarrada de Estrella junto a su padre ya sin vida. También están Montoyita al toque en un tangos y Antonio, Josemi y Juan Carmona (Ketama) reunidos para secundarle en una sugerente nueva versión de “La Estrella”. Pero aquí suman sus talentos artísticos fuera del arte jondo el compositor y pianista británico Michael Nyman y el guitarrista estadounidense Pat Metheny que aportan texturas sonoras brillantes y originales. El cuarto trabajo de Estrella Morente tiene la sabiduría del genial granadino y la sabia viva que discurre por legítima heredera; el disco está producido por su padre –Morente sólo produjo discos a Estrella y también estaba detrás del primer disco de  su hija menor, Soleá, y que aún permanece inédito pero que todo apunta a que  será publicado próximamente-, y muestra a una cantaora caleidoscópica, que deslumbra en los palos más flamencos con su nítida, sedosa y poderosa voz, y transita cómodamente palos como las sevillanas o rumbas. El disco se cierra con un estremecedor adagio donde Estrella y Enrique se arropan, vibran y nos conmueven sin medida. Ahora el futuro de Estrella está en su cante, aquí ha plasmado magníficamente su arte que es mucho, y sienta unos sólidos cimientos para construir sus nuevos proyectos.

ESTRELLA MORENTE
Autorretrato
(Emi Music, 2012)
www.emimuisc.es