Por el repertorio, se trata del álbum más jazzístico que ha publicado Jorge Pardo. Hasta ahora en sus trabajos había grabado sus propios temas, donde el jazz y el flamenco comparten espacio, aunque desde muy joven ha tocado los estándar de jazz ─en el flamenco hasta hace poco no había tradición en lo que a vientos se refiere─, han sido piezas recurrentes a lo largo de su carrera como “I Love You Porgy” de George Gershwin que ha sondado en los pases en los clubes de jazz. La relación con Gil Goldstein se remonta en el tiempo, ambos eran muy jóvenes cuando el pianista estadounidense recaló en España dirigiendo el grupo de Astrud Gilberto ─la voz de la célebre chica de Ipanema─, alguien les presentó para acompañarles, y desde entonces, más de 40 años, mantienen una constante relación. “Muchas de estas canciones las escuché de niño gracias a la segunda o tercera generación de tocadiscos y la afición de mis padres por todo tipo de música… Así que están incorporadas en mis tuétanos… Cuando empecé a tocar la flauta las aprendí. Cuando mi flauta se hizo flamenca sentí que podía decir de otra manera. Cuando me liberé de ataduras las sentí así. Cuando realmente las puede decir de otra manera, llamé a Gil”, así explica Pardo el proceso hasta llegar a grabarlas en Brooklin. Los nueve temas, con piezas de Col Porter, Duke Ellington, Bill Evans,…, que conforman el álbum fueron grabados en dos o tres horas en los estudios Acoustic Recording en Nueva York, donde había viajado por motivo de la filmación del documental “Trance” de Emilio Belmonte. El jazz como lenguaje común de dos grandes instrumentistas interconectados por una forma común de hacer música.
JORGE PARDO & GIL GOLDSTEIN
Brooklyn Sessions
(Nuba Records, 2018)
www.jorgepardo.com