La polifacética y cosmopolita artista portuguesa Maria de Medeiros cuenta con un merecido reconocimiento en el mundo del cine, tiene acreditada la participación en un centenar de películas pero también se ha puesto en el papel de directora en hasta ocho filmes. Pero sigue siendo poco conocida su faceta como cantante –es hija de un compositor de música clásica– aún después de haber publicado ya  dos discos: “A litte more blue” (2007) y “Penínsulas & Continentes” (2010). Este trabajo hace el número tres de la artista lisboeta –que vivió en Viena y está establecida en París- tiene una especial relevancia puesto que es la primera ocasión que mayoria piezas que integran el álbum –ocho de las diez que ha presentado– llevan su firma en canciones con letras en español, italiano, portugués e inglés. Una decena de piezas que están cantadas desde el más delicado de los susurros y están tejidas con delicados hilos sedosos impregnados de jazz y fado, de samba y flamenco (en especial gracias a la participación de Raimundo Amodor). Dice  Medeiros que “nada a mis ojos es menos eterno que un pajarito, acróbata milagroso de los aires, tan vulnerable y tembloroso cuando agarrado por manos humanas. Me gustó asociar dos palabras tan opuestas. Y sin embargo, existen pájaros eternos. Cómo el Espíritu Santo o la Paloma de la Paz. Cosas de soñadores y idealistas, cómo quienes se echan a escribir canciones, a grabar discos en épocas tan tormentosas y poco propicias a sopladores de nubes”, un trabajo que  muestra “breves miradas a nuestra cotidiana y misteriosa realidad”. Entre los momentos más sugerentes del disco –grabado en Córdoba- está la versión que hace del clásico italiano de A. Celentano “24 Mila Baci”acompañada sólo de la guitarra eléctrica de Legendary Tigerman. En resumen, la tercera entrega de Maria de Medeiros es un álbum seductor, sensual y embriagador.

MARIA DE MADEIROS
Pájaros Eternos
(Timit 2003 SL / Pias Spain, 2012)